Propósitos de año nuevo

Año nuevo, propósitos nuevos. Son gratis, fáciles de pensar puesto que todos pensamos los mismos, y encima no tenemos ninguna obligación de cumplirlos.

Cada año, pensamos que debemos bajar peso, ser más ordenados en el trabajo, aprender idiomas o llevarnos mejor con no se quien. Pero la realidad es que prácticamente nadie lo consigue. ¿Por qué? Pues porque está claro que de un día para otro no se pueden cambiar unos hábitos que llevan con nosotros años. Una cosa es decir que empieza un nuevo año, y otra muy distinta que se empiece de 0. Siendo realistas lo único diferente de la última semana del año a la primera del año siguiente, es que cambiamos el último número del año en la fecha, que suben los precios y que tenemos menos dinero debido a los excesos navideños, pero seguimos siendo los mismos.

A finales de mes, los gimnasios estarán llenos y habrá un montón de gente matriculada para aprender inglés, o bailes latinos, pero para marzo (y creo que estoy siendo generoso), seguirán los mismos de siempre en la cinta y las pesas, y los de bailes volverán a bailar con las mismas parejas que hace 2 semanas.

No tratemos de engañarnos, empieza un nuevo año pero seguimos siendo los mismos, y si encima tratamos de obligarnos a hacer algo, el fracaso está casi asegurado. La clave para el éxito es hacer algo que nos apetece y tener ganas, de lo contrario, es posible que pasemos a formar parte del gran porcentaje de gente que deja algo al poco de empezarlo.

Suerte a los que se hayan propuesto algo.