jueves, octubre 18, 2007

Urgencias

El domingo estuve en urgencias del Ambulatorio Solchaga por unos dolores de espalada muy fuertes. No me dió tiempo ni a sentarme en la sala de espera y ya me habían llamado. Me diagnosticaron lumbago y me dijeron de coger la baja para 5 días y guardar reposo.

Como el tema de las bajas y yo no nos llevamos muy bien, el lunes volví a currar aunque fue un día jodido, pero el martes por la tarde no podía más y le dije al jefe que me iba a urgencias a que me mirasen. Cogí el coche y lo aparqué en la puerta de las urgencias del Hospital de Navarra ( de vez en cuando ocurren milagros de estos ). Nada más entrar estaba un amigo mío celador ( alguno igual os acordáis de Killermonjas ) y le dije lo que me pasaba. Me dijo que la cosa iba para rato porque había mucha gente. Me tomaron los datos, les conté lo que me pasaba y que me dolía mucho la espalda y me mandaron a la sala de espera. Me sentaba y me dolía, de pie también me dolía, pero gente que aparentemente no tenía nada pasaba delante de mí mientras rezaba para que me llamasen por megafonía. Mientras esperaba aparecioron dos policías con un detenido que me hicieron algo más amena la espera porque el chaval estaba bastante mal de la pelota y los pobres policías con la paciencia al límite aguantándolo ( incluso me pidió tabaco tres veces pensando que se lo había pedido a tres personas distintas ). Pensaba que se habían olvidado de mí así que fui a preguntar y me dijeron que tenía asignada "gravedad mínima" aunque yo creo que era de chiste porque ya llevaba más de hora y media viendo pasar gente que os aseguro que no estaban tan mal como yo. Ya no podía más, el dolor empezaba a ser horrible y acabé tumbado en el suelo porque era donde menos me dolía. Mi colega me vió y me ofreció una camilla, pero le dije que estaba bien así, que sólo quería que me diesen algo para el dolor. En esto que aparece una doctora y me dice que no puedo estar en el suelo, y le digo que es el único sitio donde no me duele, pero aun así me hace levantarme. Dos horas y media después de haber entrado aparece mi colega y me mete para adentro. Me dice que le ha dicho a un médico que había un chaval tirado en el suelo de dolor y me pasaron. Todavía no puedo creer que un lumbago que te obliga a estar en el suelo por el dolor, sea gravedad mínima, increíble.

Ya dentro una chica muy maja, me puso una vía, me pusieron un relajante muscular y me mandaron a hacer placas. Mientras estaba esparando tumbado en la camilla en el pasillo me enamoré dos veces. ¡¡¡Que tías!!! Una era paciente y la otra una doctora morena con ojos grises... ¡¡¡guapísima!!!

Ya por fin me pusieron un valuim que fue lo que más me hizo, porque aunque no me quito mucho el dolor, me dejó en los mundos de Yupi y se hizo más ameno todo. Al final, me han subido la medicación ( más fuerte que la que me dieron el domingo ) y me aconsejas reposo, pero es que cuando hay que trabajar, pues hay que trabajar.

A ver si estos dos días de fiesta me sirven para descansar un poco y recuperarme.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Psa...aficionao!
Yo la ultima vez conforme entraba estaba en un box con el dedo pinzao para la saturacion de oxigeno, con la via y con mascarilla de oxigeno. Es lo que tiene llegar inflao como un balon y sin poder respirar (KEBAB EZ!!). Eso es gravedad, un lumbago es dolor, pero no es muerte...
Dicho esto, mejorate

Anónimo dijo...

Hale, pues ya sabes lo que toca, a cuidarse, y la proxima vez que te digan que te cojas la baja, ¡hazles caso! Debo añadir que sí, que el servicio de urgencias de la zona hospitalaria (virgen del camino y hospital de navarra) lleva mucho tiempo que se ha quedado pequeño. Alguien debería hacer algo.