jueves, agosto 27, 2009

La aburrida vida del pene

Ahí está, todo el santo día a oscuras sin poder ver nada y cuando puede, mejor que no vea nada porque para lo que hay que ver... Aún si le toca trabajar en casa, pase, pero si le toca trabajar de noche el panorama es desalentador: papeles mojados, colillas, restos de vete tú a saber qué...

Y no me quiero pensar la vida que llevarán los penes de los típicos flipaus con los pantalones hiper prietos, el pobre aparato tiene que quedarse sin aire todo espachurrado.

Eso sí, hay veces que tiene momentos de, ¿placer? Por que claro, nosotros disfrutamos del sexo, pero se ha parado alguien a pensar si al pene le gusta tener que meterse ahí. ¿Alguien ha metido la cabeza y sabe lo que hay dentro? ¿Será agradable para el pobre pito? Y si encima nos juntamos con dos que no se duchan, el resultado puede ser dantesco.

En el fondo me dan pena, porque no se me ocurre ningún momento en que el pene disfute.

Me alegro de no ser pene.

P.d: dedicado a Adriana, lo prometido es deuda.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

yo sigo pensando que es mejor que mande el cerebro sonbre el pene, malo si es él el que decide...
Gracias por la dedicatoria del este bonito post... cabr...

Yuck dijo...

Da igual, porque el pene no está demostrado que tenga cerebro. Aunque claro, hay casos en los que es evidente que lo sustituye.

Fraggle dijo...

En serio, lo tuyo es mu grave.Pero que mu grave...Cada vez los hombres me sorprendeis más: las vueltas que le podeis dar a eso!! Como soy una mujer decente yo de estas cosas no hablo...jijiji

Anónimo dijo...

Jajaja, no te imaginas las vueltas que le podemos dar a "eso". Pero es preferible que nos las den...

Fraggle dijo...

guarrillo....jijiji
No contesto por si lo leen menores que luego "la mano negra" me borra.jajaja

Anónimo dijo...

vaya pedrada tienes de vez en cuando ertxo!!
fdo. un gentleman