viernes, junio 20, 2008

¡Qué paciencia!

Hoy he tenido un enfrentamiento en la calle con un tío. La cosa es que ayer aparqué el coche en una calle y cuando fui a cogerlo me lo encontré con un golpe en la parte de atrás. No había nota ni nada que se le pareciese. Hice una mala leche que no veas, pero a veces ( sólo a veces ) se hace justicia. He llegado hoy a la misma calle ( tengo una obra ahí ) y me encuentro un coche aparcado donde estaba el mío del mismo color que las marcas que tengo yo. Miro delante y, ¡sorpresa! tiene un golpe con la misma forma, color y altura que el mío. Voy corriendo a la nave a cambiar el coche de empresa por el mío y cuando llego ya no está. Llamo a la policía y les cuento el tema. Me dice que van a ir a comprobarlo. Mientras llega la policía aparece el dueño con el coche y lo aparca.

La conversación empieza así.

ertxo: perdona, ¿le has pegado a mi coche?

dueño: no

ertxo: ¿seguro?

dueño: si, este coche lleva parado aquí dos semanas.

ertxo: mentira, este coche ayer aquí no estaba.

A partir de ahí, se he pa puesto a dos cm de la cara y ha empezado a insultarme y amenazarme. Le he dicho que por favor no me gritara que yo así no tenía nada que hablar con él. Él a lo suyo, amenzanado, diciéndome que me grita porque le da la gana, que yo me calle, que no tengo nada que decir... Yo educamente y sin pestañear le digo que por favor no me grite y que la policía está de camino para aclarar el tema. Se sube a casa amezándome con partirme la cabeza con un martillo y no se cuantas cosas más.

Cuando llega la policía, el tío baja y hasta la policía le tiene que decir que as cosas con educación porque están ellos de testigos y pueden poner todo en el parte. Al final, la policía se lleva las fotos de los dos coches con matrículas y me dicen que demos parte a los seguros. Por cierto, me han llegado a decir si quería poner denuncia por las amenazas. Les he dicho que no, pero que si lo vuelve a hacer, entonces si.

La cuestión es que no he perdido los nervios en ningún momento y he estado bien tranquilo ( que creo que lo alterado todavía más ) y creo que la culpa la tiene el aikido. No se si el aikido en si, la gente que he conocido en él, o todo lo que leo por los foros, pero el caso es que me he mantenido calmado y firme y creo que eso ha podido con él. Eso si, como venga otro día con intención de pegarme, antes él que yo, eso lo tengo claro.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Has estado muy bien!