jueves, marzo 12, 2009

Sentarse

Sentarse es un acto totalmente natural. Lo podemos hacer en una silla, en un banco, o simplemente en el suelo. Pero claro, como todo en esta vida, lo tenemos que complicar, si no, no tiene gracia.

El martes tuve una charla en una sala con unas ochenta sillas. Era una charla organizada por el Colegio de Aparejadores, por lo que por lo menos yo, iba pensando que habría algún conocido. Yo llegué pronto, y me senté al fondo de la sala, ya que veo bien dejo las primera filas para los cegatos, y espere pacientemente. Entonces empezó a entrar gente, que teniendo 75 sillas libres, no sabía donde sentarse. Es una decisión importante está claro. Una se sentó en mitad de la sala mirando a todos lados como intentando ver si alguien le miraba mal, o buscando a alguien conocido.

Todo esto es fácil cuando hay poca gente, pero cuando llegas y ya hay 50 personas sentadas, ¿dónde te sientas? Si hay algún conocido es fácil, pero si no, ¿qué haces? Lo normal es buscar un sitio al fondo o en un lateral para no molestar a la gente, mas si cabe, con la charla empezada. Pero claro, ese señor tiene mala pinta, esa otra me cae mal de la carrera... y cuando se ha sentado en un sitio donde no molesta, ve entre las cabezas un sitio privilegiado, que claro, está libre porque la gente no se ha dado cuenta lo bueno que es, y va hacía él, molestando a todo hijo de vecino.

Lo peor de todo, es que hasta que no deja de entrar gente, sólo puedes estar atento a esto, y te acabas perdiendo media charla. Más vale que no era gran cosa.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Dos cosas.

1) tu en el curro bien, ¿No?.

2) y el plan Bolonia ¿Cómo te afecta?

Hablando de sentarse, suelo llegar 10 minutos antes a esas maravillosas charlas y son bien entretenidas, me paso el rato dibujando. Al siempre se saca de ellas, algún comentario o algo, que además no viene al tema.

Saludos.

Anónimo dijo...

Menuda mierda de teclado que escribo sin ver lo que pongo lo envió y al releerlo me faltan palabras... pero se entiende, sino que pregunten (o no hagan ni caso).

Anónimo dijo...

¿El trabajo? Bueno, en la cuerda floja, pero de momento tengo. Si toca unos meses de paro, pues tocará, que le vamos a hacer.

Respecto a Bolonia, en principio no me afecta en nada. Sacarme la titulación de Ingeniero, con el tiempo es posible que sirva para algo si al modificar las leyes de la edificación nos asignan más atribuciones, pero de momento no cambia nada.

Eso sí, con el tiempo, me imagino que para puestos públicos, dejarán de pedir arquitectos ténicos y pedirán ingenieros.

Anónimo dijo...

Ahora me explico porqué cuando hay una reunion con el jefe o llego sobrada de tiempo o me toca siempre en primera fila ¿será por cegatilla? En la primera fila el jefe suele hacer alusiones o decir cosas como "a que sí?".-mirándote con una cara de dasafio que asusta, (a ver si hay "güevos" de decirle que no) o lo peor: pide ideas aportaciones, o explicaciones sobre algun tema de ultimiiiisima hora y te pilla "in albis".
¿os habeis fijado que a los de gafas de las primeras filas nos sale humo de la cabeza? Es de una continua busqueda de respuestas rápidas para ese puñetero ponente o en su defecto jefe.

Anónimo dijo...

Otra cosa:si habeis estado en cole de monjas sabreis que lo mejor es llegar a la misa de los últimos porque cuando si llegas pronto y te sientas atrás oyes una bocecilla chillona que !no, no es la voz de Dios! Es la hermana "nosequé" diciendo "los bancos de delante están libres.
Ya está.Ya no puedes ni cantearte y a lo peor te toca leer:ya que "estas aquí cerquita" dice la misma voz.¡Será @#&%"!

Anónimo dijo...

Mierda!! Gran Maestro: se me fue el dedo CORRIJO: VOCECILLA.
Imploro su perdón

Anónimo dijo...

Perdonada hermana, perdonada.

Anónimo dijo...

Yo me siento... flex