miércoles, febrero 24, 2021

Contacto

 Como ya dije en otro post, los españoles somos muy de contacto, de abrazos, besos... y yo ya llevo demasiado tiempo sin contacto. Lo echo de menos, mucho. Un buen abrazo, una caricia, un beso... 

Recuerdo que a mi pareja siempre le decía que el mejor rato del día era el de irnos a dormir y abrazarnos. Era una sensación de paz, de tranquilidad... Era nuestro momento, sin que nadie nos molestara (aunque desde que llegó Sara eso cambiaba a veces, jeje) Recuerdo estar abrazado a ella y desear que el tiempo se detuviese y que aquello durara eternamente. 

Ahora entre mi separación y la pandemia me han privado de ese contacto tan necesario para mí. Tengo ganas de volver a sentir todas las emociones que te produce un abrazo, los escalofríos de una caricia, la dulzura de un beso...

Espero que más bien pronto lo pueda volver a disfrutar, porque es de las cosas que más echo de menos desde que empezó la pandemia y desde que mi pareja decidió irse.

martes, febrero 23, 2021

Dreams

 Once años. La verdad es que se escribe fácil, pero son muchos. Once años que viví feliz, ilusionado, con grandes retos superados y grandes momentos vividos. Once años que se fueron en un suspiro y más de dos años después, echo la vista atrás y todo me parece un sueño. Veo fotos, recuerdos, lugares... y sin embargo una parte de mí parece que no reconoce que todo aquello pasó alguna vez y que yo formé parte de algo maravilloso.

Supongo que me estoy adecuando a mi nueva vida y mi cuerpo trata de olvidar para evitar el dolor. Un dolor que está ahí, que sigue y que seguirá. El miedo que tengo es transformar ese dolor en odio, aunque una parte de mí lo desea para intentar llevar mejor la situación. 

Es increíble lo rápido que pasa el tiempo y yo me doy cuenta que llevo dos años perdidos, en los que prácticamente he deambulando sin rumbo y totalmente a la deriva. Muy poco se salva de este tiempo, muy poco.

P.D: Dreams, una mezcla de pasado y quién sabe si futuro.



lunes, febrero 15, 2021

San Valentín

 Ayer fue el día de los enamorados. Hace un par de años que para mí no significa nada ese día, no por lo menos en el sentido que lo hace para el resto de la gente. En San Valentín de hace dos años, la persona con la que había compartido 11 años de mi vida, abandonaba nuestra casa. Y tal día como hoy, hace 2 años me enfrenté a la soledad por primera vez. 

Recuerdo que apenas dormí, y eso que llevaba más de un mes durmiendo solo, pero no era lo mismo hacerlo en tu casa, solo, sin nadie más. Me costó mucho dormir, la verdad es que apenas lo hice. Todo había terminado, todo empezaba. 

En aquel momento comprendí que mi vida iba a cambiar para siempre. Por desgracia y desde entonces todo ha ido mal. 

A pesar de que fui capaz de quitarme esos kilos que me sobraban, ya han vuelto a su ser.

En el tema laboral, las cosas no van la mejor manera posible, al menos es lo que a mí como trabajador se refiere.

En el tema personal, afectivo, nada de nada. La verdad es que estoy perdiendo la esperanza de rehacer mi vida, por lo menos mientras dure la pandemia, porque no hay manera de conocer gente. Y eso creo que es lo que más miedo me da, la posibilidad de acabar solo. Yo que pensaba celebrar los 40 por todo lo alto, y resulta que los voy a celebrar sin la persona que tenía las mismas ganas que yo, soltero y seguramente en medio de la jodida pandemia.

A los que ayer tuvisteis algo que celebrar, enhorabuena, os deseo que dure. A los que no, tranquilos, no estáis solos.

lunes, febrero 08, 2021

The Rising

 17 de mayo de 2003.

Un par de jóvenes y una mujer que rondaba los 50 asisten por primera vez a un concierto de Bruce Springsteen. Sería el primero de unos cuantos para algunos y algo único para otro.

Recuerdo estar haciendo cola en las inmediaciones del estado Olímpico de Montjuic, con un solazo de cuidado y escuchando una y otra vez "Waiting on a sunny day".

Podría contar muchas cosas de aquel concierto, porque realmente dio para escribir una cuantas líneas, pero hoy me quedo con el comienzo, cuando la banda salió al escenario y toco la primera canción. Jamás olvidaré los primeros acordes y como todo el mundo se volvió loco. "The Rising sonaba a todo volumen, todo había comenzado.

Es una canción que habla de levantarse tras la caída y de luchar, de luchar por recuperar lo que teníamos. 

Sé que ya no nos vemos como antes, pero también sé que aquella amistad nunca desapareció. Cada vez que te veo es como si no hubiese pasado el tiempo, más allá de un poco más de tripa o algo menos de pelo. También sé que leerás esto y por eso te quiero dedicar esta canción, para que luches, para luches con todas tus fuerzas porque el esfuerzo va a merecer la pena. Sabes que más allá de estas líneas, me tienes para lo que quieras. La pandemia no nos pone las cosas fáciles, pero seguro que encontramos un hueco para vernos y recordar aquel concierto, o las innumerables juergas nocturnas que hemos pasado.

Te quiero amigo, y sé que el sentimiento es mutuo. Por eso pienso apoyarte aunque sea desde la distancia porque te lo mereces.

Un abrazo muy fuerte y "Come on up for the rising"



domingo, febrero 07, 2021

Krav Maga

 Algunos lo sabréis y otros no, pero desde septiembre más o menos estoy entrenando Krav Maga.

Es una técnica de combate israelí, bastante contundente. En su día hice 5 años de Aikido y aun teniendo algunas similitudes, sobre en cuanto a salidas de agarres y estrangulamiento se refiere, el resto es bastante diferente. La principal diferencia es que aquí aprendemos a pegar, y la defensa es más contundente. El Aikido busca las inmovilizaciones mientras que aquí buscamos se efectivos lo antes posible.

Algo que tenemos aquí que se echa de menos en Aikido, es el combate. Lo hacemos con protecciones, y te ayuda a ver lo difícil que es aplicar las técnicas es un situación "real". Si ya es complicado entrenando, no quiero saber qué pasaría en una pelea en la calle. La verdad, espero no saberlo nunca.

Por otro lado, unos cuantos ya nos hemos federado y empezamos la carrera para obtener los diferentes grados, siendo una motivación extra para entrenar.

Ya os iré contando, pero de momento estoy contento con esta nueva aventura.

Si a alguien le pica la curiosidad, hay mucho material en internet donde poder ver de qué va el tema, y si quedáis con ganas, siempre podéis venir un día a probar que seguro que os gusta.

https://www.defensapersonalkm.es/






viernes, febrero 05, 2021

My way

Frank Sinatra cantaba aquello de "i did it my way".  Y creo que ahora más que nunca debemos hacer las cosas "a nuestra manera". 

La pandemia nos ha cogido a todos por sorpresa y no estábamos preparados. Y el llevar ya un tiempo considerable en esta situación hace que estemos más cerca de la locura que de la libertad total. 

Hablando con mi psicólogo le decía en broma que estoy por sacarme la carrera de psicología porque parece que es el futuro. Y lo digo porque la mente es la parte que peor lo está pasando en la pandemia. Los españoles somos gente de socializar, de juntarnos con cualquier excusa y sobre de todo de tocarnos. Nos encanta darnos abrazos, besarnos y cualquier contacto en general con nuestra gente. Es por todo ello que creo que en el sur de Europa lo estamos pasando peor que los países nórdicos por ejemplo.

La mente está sufriendo mucho, pero también es cierto que cada uno sufre a su manera. Cada uno tiene unas circunstancias que le hacen pasarlo de manera diferente a otros. Es cierto que se puede generalizar en gente que vive sola o gente que no, pero aún así, dentro de estos dos grupos hay muchos tipos de personas. Seguro que hay gente que vive sola que envidia a los que tiene familia y no están solos, y habrá madres o padre de familia que matarían por pasar un fin de semana ellos solos alejados del ajetreo diario y los terremotos que tienen en casa.

La situación de cada uno no es mejor ni peor que la del vecino, es simplemente su situación. Porque aunque veamos al gente bien, no quiere decir que lo esté, básicamente porque no tenemos ni idea de lo que le pasa por la cabeza.

Por eso tenemos que tener en cuenta que estamos "solos" contra esta pandemia. Nadie está igual que no nosotros, todos tenemos que entender que nuestra situación es única y así mismo nuestras reacciones. Habrá que gente que está encantada con tener una excusa para no salir de casa, y otros que cada viaje al supermercado es un pequeño oasis en el desierto. Del mismo hay gente que solo se aburre, y otra que acaba con estrés, depresión, ansiedad... 

Desde aquí os animo a tomaros la cosas con tranquilidad y sobre todo aprovechar cada buen momento, porque tengo claro que esto pasará antes de que nos demos cuenta y con el tiempo miraremos para atrás y esto habrá sido una etapa que no habrá hecho más fuertes mentalmente. O eso espero.



miércoles, febrero 03, 2021

Estoy de vuelta

 Aquí estoy, otra vez con la página en blanco delante y con ganas de contaros cosas.

La verdad es que ha pasado mucho tiempo desde la última vez que publiqué y también han pasado muchas cosas. Cosas que por un lado o por otro me han marcado y han dado grandes giros a mi vida.

Por no hacer una entrada que parezca más un libro, os diré que tuve una hija maravillosa hace 4 años, que me separé hace dos y que el año pasado perdí a uno de mis mejores amigos.

No diré si es justo o no todo lo que me ha pasado, porque no soy quién para juzgarlo, pero si diré que las cosas que me han pasado, sobre todo estos dos últimos años me han afectado para mal. Si a las cosas puramente personales, le añadimos que estamos inmersos en un pandemia a nivel mundial que nos está dejando como ratones en su jaula, pues os podéis imaginar como estoy. Lo sé, sé que no queréis entradas tristes en el blog, pero esto es solo una introducción a la que espero que sea una etapa de publicaciones productivas, al menos para mí.

Últimamente estoy hablando con dos amigas con las que comparto algunas vivencias y sobre todo una manera de verlas y afrontarlas. La verdad es que me están ayudando a ver que no soy un bicho raro, que hay más gente como yo por ahí.

Una de ellas, me ha recomendado un libro sobre como nos vemos y nos tratamos a nosotros mismos. Llevo leídas 100 páginas y es todo "tan fácil" como tratarnos de la misma manera que trataríamos a un amigo, un familiar, alguien a quien apreciamos. Somos mucho más duros con nosotros mismos que con nadie más y eso nos afecta negativamente. Digo es que fácil, y lo pongo entre comillas, pero la verdad es que me parece algo muy complicado. Yo puedo ser comprensivo con alguien que comente un error o que no hace las cosas de la manera que me gustaría, pero no me consiento a mi mismo esos errores o comportamientos. Y en ello puede llegar a estar nuestra felicidad. El libro habla sobre ser comprensivos con nosotros mismos. Es complicado hacerlo sin ver una parte de conformismo, pero es lo que voy a intentar, tratarme bien, como yo trato a la gente y como acepto sus errores y comportamientos. No se trata de aceptar nuestros fallos y ya está, si no de hablarnos a nosotros mismo e intentar sacar algo positivo.

Si nos habláramos a nosotros mismos como hablamos a los demás, seguramente estaríamos mejor y tendríamos menos discusiones interiores. Al fin y al cabo es aquello de "consejos doy y para mi no tengo". Pues ya va siendo hora de tenernos, porque por mucho que haya gente que nos importa, nada es más importante que uno mismo, porque desde nuestra propia felicidad seremos capaces de proyectarla a los demás. Si por el contrario estamos mal por dentro, no seremos más que una de esas personas tóxicas a las que nadie quiere cerca.

Por supuesto, la teoría es más o menos fácil, pero poner todo esto en práctica es complicado.

Espero poder contaros conforme pases los días, que voy mejorando en la búsqueda de esa paz interior, algo que necesito para poder dar mi mejor versión a los demás.

P.:D: Gracias chicas por vuestros consejos y apoyo.