Soy ateo pero creo en Bruce

El martes estaba yo felizmente haciendo ejercicio cuando me llama mi madre para decirme que nos habían conseguido entradas para ver a Bruce Springsteen. La alegría muy inmensa.

Al día siguente cuando salió mi madre de trabajar, cogimos el coche de mi tía ( el que uso siempre para los viajes largos ) y nos pusimos rumbo a Santander. El viaje fue comodo y sin sobresaltos y pasadas las de 3 de la tarde estabamos ya en la cola. Mi número era el 130. Trás tomar una caña con el chico que nos cosiguió las entradas, nos fuimos a la pasar lista y a hacer cola. La gente contaba historias de los conciertos de días anteriores o inlcuso de hace algunos años. Cuando ya faltaba poco para abrir las puertas, había nervios en el ambiente. Pasadas las 8 de la tarde, se abrieron las puertas y entramos. Cogimos un buen sitio, pero todavía nos quedaban 2 horas de espera. Mientras hablabas con uno o con otro, se iba pasando el tiempo rápido. Cuando ya faltaba poco la gente empezó a gritarle al "Boss". ¡¡¡ Bruce !!! ¡¡¡ Bruce !!! acompañado de palmas con la intención de que nos oyese y saliese antes. Pasadas las 10 y 10 de la noche... salió la banda al escenario. La gente enloqueció. La banda salió con una estética que parecía salida de las peliculas de gansters de los años 20. Corbatas, chalecos, tirantes y gorras hacían que te sintieses en Chicago a principios de siglo. Cada canción era mejor que la anterior y la gente se iba animando cada vez mas. Hasta la gente de las gradas acabó de pie bailando y disfrutando con la música de Bruce y la Segger Sessions Band. Nadie quería que aquello acabase, pero llegado el momento de decir adiós, volvimos al principio... ¡¡¡ Bruce !!! ¡¡¡ Bruce !!!. La gente estaba contenta con lo que había visto, todo el mundo coincidia en que había sido un concierto genial. La vuelta a casa fue un poco pesada por eso del sueño y el cansancio, pero mereció la pena.

Hasta ayer era ateo, a partir de hoy creo en Bruce Springsteen.