Diferencias

Bien, supongamos que somos gente normal y corriente. ¿Qué diferencias podemos ver entre la taza del water de una casa normal y la de un bar?

A simple vista no podemos encontrar muchas, salvo la ubicación o la falta de elementos en alguna de ellas, pero por alguna extraña razón, hay gente que debe ver diferencias abismales, porque cuando usan la taza de un bar, no tiran de la cadena, no aciertan dentro, la llenan de colillas o papeles...

Si suponemos que las tazas son iguales, ¿mearán fuera en las tazas de sus casas? ¿dejarán la cadena sin tirar?

Con lo poco que cuesta ser un poco normal y decente...

Al fin libre

Pues bueno, se acabó el calvario. Ya soy una persona libre. No he actualizado durante estos días, porque para colmo de males había problemas de internet en la oficina.

El martes a la tarde me dijeron que fuese organizando la mesa y dejando en un papel como tenía el ordenador, así que me olía por fin el tan ansiado despido. Ayer fui a por los papeles del paro y ahora toca esperar a que me llamen para coger el finiquito, que seguro que será motivo de peleas varias.

Desde luego, una cosa tengo clara, soy feliz, me han devuelto la vida. Ayer estuve entrenando y disfrute como hacía tiempo no disfrutaba, y tener la cabeza despejada ha sido el motivo.

Ahora toca descansar, aprovechar para ir al gimnasio por las mañanas y poco a poco ir buscando trabajo, que algo acabará saliendo.

Semáforo

Verde, ambar, rojo. Frenas hasta detenerte. Tienes 66 segundos para ti. Miras a tu alrededor. Ves a gente conocida, ves coches. Piensas que hará el que tienes al lado. Piensas en lo que tienes que hacer durante el día. La compra, pasar a recoger a los críos al colegio. Piensas en la reunión de media mañana. Todo esto mientras llevas con el pie y las manos el ritmo de la canción que suena en la radio. Mientras tarareas miras el tiempo. Ya falta menos. Metes primera. 3,2,1, verde.

Esperando

Las gotas de agua resbalaban por el cristal de la ventana mientras ella se mecía en la mecedora. Su propio reflejo en el cristal le mostraba lo que no quería ver, y las fotos antiguas en la mesilla, le recordaban tiempos mejores.

Las nubes se desplazaban lentamente por el cielo al igual que el tiempo en el reloj. Llevaba esperando tanto tiempo, que había perdido la cuenta. Nada importaba ya. Sus ultimos meses habían sido una eterna soledad que parecía no tener fin. No sabía interpretar la ausencia de noticias, y eso la inquiteba cada vez más. El silencio era su única compañía y la ventana su única conexión con el mundo. Estaba como hipnotizada. Sólo una cosa podría despertarla y devolverle lo que un día fue una vida perfecta.

Se abrió la puerta de casa.

Demasiada suerte

Es increíble la suerte que hay todos los días en las carreteras. Cuando voy y vengo a trabajar, veo por lo menos 3 o 4 situaciones en las que lo más normal es tener un accidente, pero por una cosa o por otra siempre se librán. La gente va como locos, se meten donde no hay hueco físico para pasar y obligan a la gente a hacer maniobras de evasión para evitar el accidente.

Lo que más me revienta de todo esto, es que estos impresentables siempre se libran de todo y siempre les salen bien sus macarradas, cuando seguro que si cualquiera de nosotros, por error, tiene que hacer un cambio de carril a última hora, se puede pegar horas hasta que alguien le deje pasar.

La gente se cree que el resto somos tontos y que hacemos las cosas bien porque somos unos pardillos.

Cada día hago más mala leche en el coche, y unido a la situación de ansiedad que vivo últimamente, hace que los viajes en coche diarios, me saquen de mis casillas.

Resumen Madrid

Ya hemos vuelto de la locura de torneo. Se superó el record de participación en un evento de Magic, con 2220 participantes. La verdad es que fue una locura. Demasiado tiempo de espera entre ronda y ronda, demasiada gente, demasiado cansancio... Al final, después de casi 9 horas para jugar 5 partidas, decidí retirarme y volver con unos cuantos al piso a descansar, y recuperar sueño perdido.

Ha sido mi primera experiencia en un GP, pero la verdad es que ha sido bastante agotadora. No se si me pillarán en otra igual. Prefiero torneos pequeños de barrio con 40 personas, por lo de este fin de semena, realmente me ha superado.

Destacar a uno de los nuestro, Amaiur, que se marcó un 8-1 el primer día, siendo el único que pudo jugar el segundo día del torneo.

Yo acabe con 3-2 en las 5 rondas que jugué, que teniendo en cuenta que una ronda estaba perdida de ante mano por la baraja que jugaba el otro, no está nada mal.

Veremos que pasa otro año, pero veo complicado que me pillen en otra de estas, aunque, ¿quién sabe?